Murió por asfixia, provocada por el oficial Derek Chauvin, quien tras esposarlo y ponerlo boca abajo con un carro policial encima de Floyd, y con la ayuda de los agentes Thomas Lane y J. Alexander Kueng; el oficial presionó al arrestado contra el pavimento con su rodilla apoyada sobre el cuello de George Floyd durante 8 minutos y 46 segundos. Floyd, mientras era detenido, repitió varias veces la frase "I can't breathe" (en español, "No puedo respirar"). Mientras esto sucedía, el oficial Tou Thao, quien también se encontraba en la escena, se limitaba a observar y controlar a los presentes. Este suceso fue grabado con los teléfonos móviles de los presentes y difundido en diversas redes sociales. Los cuatro oficiales involucrados fueron despedidos al día siguiente. Según algunos medios, Floyd fue arrestado por intentar hacer una compra con un supuesto billete falso de 20 dólares en una tienda de comestibles. A solicitud del Departamento de Policía de Mineápolis, el FBI está conduciendo una investigación federal de derechos civiles respecto a este incidente. Paralelamente, la Oficina de Aprehensión Criminal de Minesota se aboca a la investigación de posibles violaciones de los estatutos estatales. Producto del fallecimiento de Floyd, se llevaron a cabo una serie de manifestaciones, las cuales partieron en Mineápolis y se extendieron a todo el país. En un principio, las manifestaciones y protestas provocadas a raíz del deceso de Floyd fueron pacíficas. Luego, parte de los manifestantes vandalizaron un recinto policial y un AutoZone, y además incendiaron, saquearon y dañaron restaurantes y tiendas en los alrededores, como sucursales de Wendy's, Target y Dollar Tree. La policía respondió a estos hechos disparando gases lacrimógenos y balas de goma contra los manifestantes